El Poder del Yo Soy

En esta ocasión quiero compartirte otra herramienta de Reencuentro Personal, que se llama el Poder del Yo Soy, pero antes de profundizar en ella quiero llevarte a conocer tu  propio corazón, para qué es, cuál es su función y mucho más…

Necesitas saber todo acerca de cómo funciona el corazón para poder comprender el poder del Yo Soy.

La historia comienza cuando nuestros guías más elevados buscaban un lugar para guardar sus enseñanzas; debía ser un lugar inalterable, indestructible y por lo tanto no material y que fuera con el ser humano en todo tiempo y momento y que con sólo al mirar dentro, pudieras acceder a él. Ese lugar fue llamado CORAZÓN. 

¿Cómo conozco y camino al corazón? El camino al corazón no es un camino fácil porque hay muchas, muchas dudas y siempre solemos iniciar afuera, hacia lo que podemos entender como iluminación; esto es, religión, psicología, fe, la razón, los gurús, la filosofía, lo secreto, lo oculto, los cursos de crecimiento personal, los viajes, los desapegos, etcétera, etcétera, pero tarde o temprano llegamos a la búsqueda de la más Sagrado. Lo Sagrado se encuentra en nuestro corazón, y para abrirlo hay que quitar el velo que lo cubre. Ese velo se logra quitar cuando dejamos de pensar tanto y empezamos a sentir más, se quita cuando buscamos lo sencillo, la inocencia y también aquello que no es secreto, pero que si está oculto en el corazón. Lo complicado o difícil es que buscamos a través de la mente y el camino al corazón es a través de VIVIR LA VIDA,  sintiendo que todo es sagrado y por tanto no se juzga, ya que se entiende es divino y lo que es de lo divino se vive sintiendo, no pensando, ni juzgando. 

Debo aclararte que acudir a terapias de crecimiento personal, al psicólogo,  a la religión, etcétera, no está mal, pero debes ir con la idea de que el trabajo lo haces tú y la otra parte es sólo una guía para llevarte al interior, no es la responsabilidad del otro, si no la tuya. Tu responsabilidad es abrirte para sanar, tu responsabilidad no es creer que por tomar un curso ya estás resuelto. La vida siempre te  pondrá pruebas y los estudios, terapias que hagas son sólo herramientas para avanzar y resolverte.

El camino al corazón implica compromiso con uno mismo, implica ser consciente de tus sentimientos y emociones aun cuando sean molestas o no te gusten y esto se manifiesta estando presente y no rechazando nada de lo que te pase, se logra a través de tu valentía a pesar de todo y a espaldas de nada. Se logra dejando partir lo que a uno no le pertenece y aceptando en cada vivencia la oportunidad de aprender, de progresar y de evolucionar, pero desde el corazón.

El camino no se logra rechazando o negando las cosas, se logra cuando enfrentas los obstáculos para trascenderlos y transmutarlos. De nada vale negar la evidencia de lo que duele y lo que duele lo debes aceptar.

Cada sentimiento negado o no expresado se instala en el equipaje que uno arrastra vida a vida hasta que lo resolvamos; por ello debes resolverte, por ello debes cerrar ciclos, por ello debes caminar en el presente o en el aquí y en el ahora.

Cada solución a cada problema está en nuestro archivo de registros y esos archivos están en el corazón, de ahí la importancia de caminar hacia tu interior para resolver todo aquello que te aflige. Por ejemplo, si sientes amor, entonces sabrás amar, amarte, sabrás inspirar, alentar y caminar hacia la felicidad y el bienestar. Si sientes dolor, enojo, frustración, entonces en tu ser hay incomprensión, aislamiento, soledad y por tanto niegas esas emociones. Cómo las niegas: tapándolas y viviendo desde la mente para no enfrentar aquello que te duele y cuando no lo enfrentas, por tanto no lo resuelves y la bola de nieve se hace cada vez más grande y grande y por ende los problemas. Cuando hay problemas sin resolver se mira hacia afuera, pidiendo ayuda, buscando culpables, reforzando traumas, anestesiándonos con evasiones, buscando ayuda en lugares que muchas veces son negativos y nefastos para ti y para los demás.

Para poder caminar al corazón debes avanzar con la fuerza de tu poder personal, evitando caer y moverte desde el ego. El ego, es la sombra que nos confunde creyendo que nuestros argumentos, carisma, capacidad de fascinar, manejar datos, poseer la razón, creerse en derecho a argumentar a los demás, es caminar desde el corazón y con el corazón.

La única herramienta que tienes para caminar hacia ti es tu poder personal y ese poder es la capacidad de sentirse bien en cualquier circunstancia, es la capacidad de poner límites con sencillez, con distancia, aun cuando uno no se sienta bien con algo o con alguien; sin mentir, sin disimular y sin hacer concesiones a pesar de tener que tomar la decisión de dejar atrás aquello o aquellas personas, circunstancias que intentan manipularte, confundirte o te imponen un compromiso en algo que no es afín a ti.

El poder personal es el don de la calma, de la paz interior que otorga la perspectiva de estar por encima de los acontecimientos, sabiendo poner límites a los abusos, a la confusión o  a la ignorancia.

El poder personal se logra quitando el velo de tu corazón, permitiéndote el acceso al archivo de datos que se encuentra ahí, en el corazón, logrando la fluidez del ser y de  estar en el aquí y en el ahora.

El poder personal es mantener la calma sin dejar de estar en la acción. El poder personal es amar lo que no es amable, es agradecer lo que duele pero también lo que alienta.

Para conectar con tu poder personal existen dos herramientas, una es la gratitud y  la otra es a través del Poder del Yo Soy. Sobre la primera herramienta ya te hablé (ver blog del poder del agradecimiento). 

La segunda herramienta es trabajar con tú Yo Soy y trabajar desde ahí es dejar atrás el personaje que creo el ego y sentir el ser de la persona que realmente eres.

El Yo Soy es el nombre de la energía de origen de toda vida, es la vibración primigenia, es la frecuencia que pone en movimiento toda creación. Para unos se llama OM, para los celtas, por ejemplo, se llama “Anam Cara”, para ti y para mí, se llamará “Yo Soy”.

El Yo Soy representa el poder creador de todo principio de vida. El Yo Soy es el poder del verbo, es decir, la capacidad de manifestar aquello que generes desde o sin el corazón. Por ejemplo, cuántas veces las personas se dicen así mismas: “Soy diabético”, “soy enojón”, etcétera, etcétera. 

Hoy mi propuesta es empezar a verte y a crear desde esa vibración y frecuencia que se encuentra en el corazón. Por tanto estaré posteando ideas para que te conectes con la frecuencia de toda creación. Sólo tendrás que decir con convicción y desde tu corazón: “Yo Soy… abundancia” “Yo Soy…salud perfecta” “Yo Soy…la luz de Dios que se enciende en mí cada día” o aquello que desees crear en positivo, en verdad y desde el corazón.

Te agradezco  por leer estas palabras y por permitirme darte otra herramienta para tu REENCUENTRO PERSONAL.

Con todo mi cariño,

Yeyetzi Cárdenas.  

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