Casi desde el inicio del año y con mucha apesadumbres he visto como muchas personas se sienten tristes, enojadas, vacías y confundidas emocionalmente. Quizá esas emociones se deban en una parte a los efectos de la pandemia, tal vez en otros las emociones no se han ido resolviendo a lo largo de sus vidas. Siempre en ambos casos se afecta al ser interior, al alma y al espíritu de las personas. Como terapeuta y con la ayuda de los ángeles he investigado el porqué de esa situación emocional y la respuesta que obtuve a través de mis guías fue: “FALTA TRABAJAR EL AGRADECIMIENTO”.
Es así que hoy te escribo para hablarte del poder del Agradecimiento o de decir con conciencia y en amor GRACIAS.
La expresión “gracias” es, una frase mágica que actúa como un poderoso mantra. El agradecer o decir gracias tiene el poder de abrir la conciencia y despertar a la verdadera riqueza. Aquellos que saben dar las gracias cuando caen en las pruebas, demuestran su valor interno y su conexión a una conciencia superior.
Dar las gracias a alguien o a algo es limpiar la atmósfera entre tú y esa otra persona o situación. Decir GRACIAS ejerce un poder liberador, que permite el desapego, el abandono, la aceptación de las cosas y facilita el perdón. Puede convertirse en una verdadera bendición para uno mismo y para los otros.
El descontento, el ver lo que los otros tienen y tú no, el estarte comparando, estrecha y bloquea tu vida; mientras que la gratitud la expande, la aumenta y abre las puertas al amor y a la prosperidad.
Cuando el agradecimiento es sincero y está lleno de ti, tiene el poder de tocar y despertar tu alma, tu corazón. Es mucho más fácil sentirse agradecido cuando nos liberamos de nuestras expectativas y nos entregamos al fluir de la vida.
Frecuentemente, NO sentimos gratitud porque creamos expectativas para todo y además creemos que sabemos lo que más nos conviene. Creemos que sabemos cuándo y cómo deben pasar las cosas. Queremos controlar absolutamente todo y si no sucede como lo habíamos creído o imaginado, entonces nos enojamos y cerramos el corazón cuando la realidad no refleja nuestras expectativas y deseos, y a medida que vamos haciendo esto, nos volvemos completamente incapaces de apreciar las maravillas de la vida, de poder ver lo que la vida nos da en abundancia y de sentirnos agradecidos de tener la oportunidad de vivirlas. Sin embargo, el secreto es mantenerse abierto, flexible y soltar las expectativas.
Es posible que te encuentres en situaciones difíciles y dolorosas, pero la verdad es que la vida, jamás te da más de lo que puedes manejar, sin importar, lo que estés viviendo. Lo que ocurre es que de inmediato juzgamos y le preguntamos al universo, a Dios, a la vida ¿por qué yo?, en vez de decir: GRACIAS POR CONFIAR EN MI Y DARME ESTA OPORTUNIDAD DE CRECER.
La gratitud cambia nuestra vibración, nuestra energía. Cuando nos sincronizamos con el agradecimiento sincero y desde el corazón, nos sentimos inmediatamente en paz y nos volvemos seres que atraen lo más maravilloso de la vida. Por el contrario, cuando pensamos negativamente, vemos sólo los problemas, el arroz negro en la sopa y solemos decir porque nada bueno llega a mi vida y es así como atraemos por ley de vibración exactamente lo opuesto a lo que queremos.
Decir GRACIAS es también una manera de soltar. El agradecimiento completa los ciclos y cierra las puertas que se hayan abierto, además cuando cierras ciclos permites que otros se abran para vivir nuevas oportunidades.
Los momentos divinos están por todas partes y algunos están muy cerca, esperando que sueltes lo que tienes que soltar, perdonar. Así que agradece lo más frecuentemente posible. Agradece de forma mental, por escrito o verbalmente. Te puedo asegurar que funciona siempre.
El hacer del agradecimiento una actitud diaria ayuda a convertir las dificultades en oportunidades, los problemas en soluciones, la carencia en abundancia, la tristeza en alegría, y además expande nuestra visión y nos permite descubrir todo aquello que era invisible para ti.
Tal vez te preguntes, ¿qué agradezco? La respuesta es TODO. Agradece los malos momentos, la vida, la enfermedad, la salud, tú día a día, tus amigos, tu casa, tu dinero…
A veces no nos damos cuenta de lo afortunados que somos. Por favor, detente un momento y mira tu casa, mira tu familia, mira tus mascotas, mira tu cama, mira el refrigerador, mira tú cartera. Te has dado cuenta que hoy despertaste y pudiste ver un nuevo amanecer, escuchar el viento, a tus seres queridos. Te has dado cuenta que cada momento que tenemos está lleno de oportunidades. Y si tal vez hoy la vida te quito algo, un trabajo, la salud, un amigo; pero te has detenido a verlo desde otra perspectiva y no como una manera de compararte con los demás o bien sentirte olvidado de la mano de Dios y enojado con la vida porque sueles hacer drama y quejarte de todo.
¡¡Cambia ya!! Inicia con una nueva actitud y empieza a valorar lo que tienes en lugar de preocuparte por lo que no tienes. Comienza a convertirte en un ser más fuerte y sabio. Comienza a limpiar tu vida y a hacerte responsable de tus decisiones, de tu vida, comienza a soltar y darle permiso a la vida y al universo para que nos traiga todas las bendiciones que merecemos.
Hoy te invito a AGRADECER por escrito y durante todos los días de tu vida por todo lo que tienes. ¡Hazlo! Y verás cómo tu vida cambia y se llena de PROSPERIDAD.
Conéctate a mis redes sociales, estaré posteando un AGRADECIMIENTO DIARIO.
Si no puedes conectarte, hazlo por ti mismo y al final une tus brazos en postura de oración e inclina ligeramente tu cabeza y pronuncia: AGRADEZCO (todo lo que quieras agradecer), después cierra con las palabras “Así sea, Así es y hecho está”.
Atrévete a hacerlo por lo menos por 21 días y después se convertirá en un hábito muy positivo.
Te agradezco por leer estas palabras y permitirme ayudarte a SANAR y mejorar el camino de tu vida.
Con todo mi cariño,
Yeyetzi Cárdenas.